15/07/25
Esta provincia sueña con el regreso del tren de cercanías: aseguran que es posible
Tucumán, una provincia que sufre a diario el congestionamiento del tránsito -especialmente en San Miguel de Tucumán- y el aumento constante de los costos del transporte público, podría ver concretado un anhelo de larga data: el retorno del tren de cercanías. Un análisis técnico exhaustivo, realizado por el experto ferroviario Ariel Espinoza, plantea la viabilidad de rehabilitar un tramo clave del ramal Central Córdoba (CC) para el transporte de pasajeros.
Un estudio técnico revelado recientemente indica que "con mínimas mejoras y decisión política" miles de ciudadanos podrían verse beneficiados.
Según informaron medios locales, el estudio, que relevó los 52 kilómetros del ramal actualmente operado por Belgrano Cargas, concluye que con intervenciones mínimas en la infraestructura existente y una clara voluntad política, el corredor podría habilitarse para uso de pasajeros en un corto plazo. Esta iniciativa no solo aliviaría el bolsillo de los ciudadanos, sino que también impulsaría el turismo en Simoca, la histórica "Capital del Sulky".
Actualmente, el viaje en colectivo desde San Miguel de Tucumán hasta Simoca puede demandar hasta casi dos horas y media y tiene un costo aproximado de $5.000. El proyecto ferroviario propone una alternativa mucho más eficiente y económica: un trayecto de aproximadamente una hora y media (incluyendo paradas intermedias) y un costo estimado de $500.
"Todo el trazado está operativo para carga y solo requiere algunas intervenciones técnicas para reconvertirlo al uso mixto", explicó Espinoza, quien proviene de una familia con tradición ferroviaria y cuenta con diversas especializaciones en transporte.
¿Vuelve el tren a Tucumán? Detalles del proyecto y beneficios esperados
El plan contempla la utilización de la vía actual del ramal CC, con salida desde la estación ubicada en 24 de Septiembre y Suipacha, a solo cinco cuadras del microcentro tucumano. El recorrido incluiría paradas en puntos neurálgicos del sur de la ciudad, como Benjamín Aráoz y Manantial Sur.
Se prevén al menos dos frecuencias diarias, de lunes a sábado, con estaciones intermedias en localidades urbanas como García Fernández y Bella Vista. Según los relevamientos, las paradas actuales se encuentran en condiciones razonables y estructuralmente en buen estado.
Las mejoras necesarias para la reconversión incluyen:
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Reparación de tramos puntuales de vía
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Acondicionamiento de pasos a nivel
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Instalación de baños e iluminación en las estaciones
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Elevación de andenes con módulos prefabricados
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Trabajo sobre los gálibos (espacio lateral libre para los vagones), debido a la presencia de árboles y construcciones cercanas a las vías, para garantizar la seguridad de los pasajeros
Más allá del beneficio directo para los usuarios del transporte, el regreso del tren de cercanías podría generar un fuerte impacto económico en toda la región. Espinoza destaca que "hay empresas e industrias —como Paramérica y AGD— que ya operan cerca de la vía". Además, podría reactivarse el ramal hasta el ingenio Bella Vista, que actualmente traslada su producción en camiones a pesar de tener el tren a metros.
Simoca, con su emblemática feria que data de 1697, es un consolidado atractivo turístico que vería fortalecida su conectividad, complementando el estratégico entramado vial entre las rutas 157 y 38 con este nuevo eje ferroviario.
Tren en Tucumán: un sueño posible con voluntad política
El experto enfatiza que "hoy no se necesita inversión internacional ni esperar décadas". Pone como ejemplo la situación de Buenos Aires, que ya utiliza ramales del Belgrano para trenes de pasajeros con locomotoras nacionales, y el exitoso tren patagónico. Incluso, la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) ya desarrolló un proyecto técnico integral que podría complementar esta iniciativa.
"No estamos hablando de una utopía, sino de un cambio cultural y de voluntad política. Tucumán en horas pico es invivible, y esta sería una solución concreta", concluyó Espinoza. La propuesta se presenta como una alternativa tangible al actual modelo de movilidad, recuperando una parte de la rica historia ferroviaria provincial, pero con una visión de futuro: un transporte más sostenible, accesible y eficiente para miles de tucumanos.
Fuente: Iprofesional