28/02/11
¿Por qué Rosario apuesta al tranvía y Córdoba al tren subterráneo?
La capital de la provincia mediterránea y la ciudad más poblada de Santa Fe comparten la preocupación de mejorar el transporte público pero llegaron a soluciones potenciales distintas ¿Cuáles son las diferencias? Este año Rosario y Córdoba darán los primeros pasos significativos para implementar nuevas modalidades dentro del sistema de transporte público. Mientras que en la segunda ciudad más poblada del país el Concejo Deliberante definen la construcción de un tren subterráneo, en la localidad santafesina avanzan los estudios para poner en marcha nuevamente el tranvía. En lo que respecta a Córdoba, la iniciativa de habilitar líneas de subte tiene origen en la Secretaría de Transporte de la Nación, encabezada entonces por Ricardo Jaime. El titular de la cartera trabajó a partir del interés en la idea del subte por parte de un grupo de empresas y así surgió la primera propuesta a finales de 2007. Desde entonces el proyecto contó con el aval del intendente Daniel Giacomino. De allí en más el Estado nacional se abocó a buscar las formas de financiar y adjudicar la obra, gestión que se cerró a mediados del año pasado en Beijing. Tras visitas oficiales de la Presidente Cristina Fernández y del actual secretario de Transporte, Juan Pablo Schiavi, se cerró un acuerdo de inversión con China Railways International. La compañía estatal china financiará el 85% de los trabajos para construir más de 18 kilómetros de redes de subte, mientras que el resto correrá por cuenta del gobierno nacional. En total, la obra requerirá 1.800 millones de dólares. Por su parte, la ciudad más poblada de Santa Fe empezó a evaluar esta y otras posibilidades a partir de la confección del Plan Integral de Movilidad por parte del Ente del Transporte de Rosario (ETR). El documento presentado y debatido en 2010 concluyó que “la opción tranviaria fue evaluada como el sistema de transporte más eficiente en tanto es: confortable, automatizado, ecológico, ambientalmente sostenible, económico en el tiempo y durable a largo plazo”, de acuerdo a un estudio de la consultora Transvectio que financió el Banco Mundial en el marco de un convenio con el gobierno nacional. En el caso de Rosario, la propuesta anunciada por la gerente del ETR, Mónica Alvarado, prevé la implementación de una traza de 20 kilómetros a nivel de calle sobre el denominado Corredor Metropolitano Norte-Sur, con posibilidad de conectar a localidades limítrofes como Granadero Baigorria y Villa Gobernador Gálvez. La construcción de esta última red precisa una inversión de U$ 300 millones. En diálogo con IMPULSO hace algunas semanas, el secretario de Servicios Públicos, Gustavo Leone, había informado que el Banco Mundial proveerá 40 millones de dólares y se busca capital privado para financiar el resto, mientras que el Estado nacional se ocupa de elaborar los pliegos correspondientes. (Impulso Rosario / Santa Fe)