15/06/15
Tren urbano: se ultiman detalles en apeaderos
Cada uno tiene su propio nombre. El diseño es modular, con un sector de sombra y un banco de cemento para la espera de los pasajeros
Luego de las primeras pruebas de circulación para la puesta en marcha del tren urbano en la ciudad de Santa Fe, se ultiman los detalles para que próximamente comience a prestar servicio y se integre como un medio de transporte más. En esta primera etapa se realizará un recorrido de casi cuatro kilómetros, teniendo como punto de partida Pedro Víttori, a la altura del Molino Franchino, atravesando el Parque Federal, cruzando por la zona del Puente Negro, y llegando hasta Estanislao Zeballos y Facundo Zuviría, donde está La Esquina Encendida.
A lo largo del trayecto, la Municipalidad instaló ocho apeaderos que tienen un diseño modular, con un sector de sombra conformado por una cubierta metálica sobre una estructura tubular con un banco de hormigón corrido para la espera de los pasajeros. Hay tres tipos de apeaderos: algunos miden seis metros y otros 12; y hay uno también de 12 metros pero con dos techos, ya que servirá no solo para aguardar el tren sino también para esperar el colectivo.
Paradas
El punto de partida desde el sur hacia el norte es la parada llamada El Molino, ubicada en Pedro Víttori y Castellanos. La elección de la denominación es por estar cerca del “Molino Franchino, Fábrica Cultural”. Este apeadero se destacará del resto porque tendrá un tamaño de 12 metros, pero es doble. Aquí también está prevista la instalación de una parada del programa Subite a la Bici. La siguiente se denomina Domingo Silva –ubicada en la intersección de esta calle con Víttori–; la tercera se llama Malvinas Argentinas y se ubica en Pedro Zenteno, a metros del Centro de Excombatientes de Malvinas –a quien debe su nombre. Estas dos últimas son estaciones con seis metros de longitud.
Los siguientes apeaderos tienen 12 metros, y están ubicados en Víttori y Quintana –se llamará Parque Federal–; y en Víttori y Salvador del Carril –se denominará La Redonda, por su cercanía con el edificio recuperado donde funcionaban los talleres del exferrocarril.
Las dos paradas siguientes tienen una garita de seis metros cada una. Una se denominará Puente Negro, en la avenida Aristóbulo del Valle y Fray M. Esquiú, y la siguiente será Ricardo Aldao, ubicada en esa calle, entre 4 de Enero y 1º de Mayo. El recorrido finaliza en la avenida Facundo Zuviría y Estanislao Zeballos, donde está la Esquina Encendida. Este apeadero se denominará Don Bosco, y tendrá una longitud de 12 metros. Aquí también habrá una estación de Subite a la Bici.
Como se informó, paralela a la vía del tren urbano se ha construido una bicisenda. Para facilitar las conexiones, cada una de las garitas tendrá su correspondiente bicicletero y áreas peatonales acordes. El objetivo es combinar las distintas formas de movilidad: peatonal, en bicicleta, el tren y el colectivo, disminuyendo el uso de los autos particulares.
Bien identificable
Cada parada tendrá bien visible su nombre, y el usuario podrá observar –como sucede en las líneas de subte–, el recorrido con sus respectivas estaciones. Cuando esté operativo, también integrará el servicio Cuándo Pasa, por lo que se podrá consultar el tiempo de espera y de arribo en cada parada.
En este marco, desde la Municipalidad se trabaja en la combinación de este medio de transporte con el colectivo. Algunas de las opciones para combinar son las líneas 4, 8 y 14, entre otras. Según las pruebas, recorrer este trayecto de 3,7 kilómetros demandará unos 10 minutos, permitiendo un ahorro del 40 por ciento de tiempo si se efectuara el mismo recorrido en colectivo.
En todo el trayecto se instalaron los equipos y sistemas necesarios para la señalización, manteniendo la circulación del tren urbano sin interferencias del tráfico automotor, maximizando el flujo vehicular transversal a las vías de circulación y brindando las mejores condiciones a los pasajeros, conductores y peatones. En este sentido, habrá un sistema de semaforización y control de tráfico vehicular, tanto para el tren como para el peatón, actuando sobre las intersecciones y sus áreas inmediatas, ordenando el tránsito vial y peatonal en el tramo de circulación. (unosantafe)