07/05/14
Otro rechazo de Jaime: dice que su presencia es “superflua”
Es otro argumento para justificar su ausencia. Ayer afirmó que no tenía plata para viajar.
Tras la polémica por la autorización a Ricardo Jaime para no presentarse en el juicio por la tragedia de Once por el gasto que le implica viajar semanalmente desde Córdoba, su abogado defensor salió a relativizar el argumento. Sin embargo, en el escrito presentado queda claro que el pedido por la cuestión económica existió.
El abogado defensor Andrés Marutián explicó: “La presentación nuestra fue por escrito, dijimos que la presencia del imputado era superflua cada vez que no podía intervenir en las audiencias testimoniales y además el Código Procesal Penal dice que los únicos obligados a concurrir a todas las audiencias son el fiscal, la querella y la defensa. Jamás nadie pidió viáticos ni se dijo que no podía pagar el boleto, fue una simple mención”.
Lo cierto es que en el escrito dice que el hecho de venir desde Córdoba le implica a Jaime “un a lto costo económico derivado de trasladarse 1.400 kilómetros semanalmente, a lo que debe adicionarse los gastos extraordinarios”.
El ex secretario de Transporte es uno de los ex funcionarios del gobierno kirchnerista más investigado por la Justicia. Además del de la tragedia de Once, afronta dos procesamientos por haber presuntamente recibido dádivas de parte de empresarios a los que debía controlar, otro por administración fraudulenta en la licitación del ferrocarril Belgrano Cargas y un cuarto por enriquecimiento ilícito, ya que la Justicia entendió que no pudo justificar un incremento patrimonial de $ 12 millones.
Los familiares de las víctimas tomaron muy mal la decisión del Tribunal Oral Federal N° 2, porque consideran que Jaime “no quiere enfrentar la verdad” y que es una parte más del maltrato que vienen recibiendo desde la tragedia.
Jaime ya había tenido comportamientos polémicos. El día de su declaración ante el Tribunal aseguró que el juicio era en realidad un juicio político contra el Gobierno kirchnerista. Y dos días después confió que no sentía “cargo de conciencia” por la tragedia.
Pero no fue el único que pidió permiso para faltar. Mario Cirigliano, uno de los dueños de la ex concesionaria TBA, tampoco irá porque el Tribunal le permitió ausentarse por motivos laborales; Pedro Ochoa Romero, el ex interventor de la CNRT, que también vive en Córdoba, no estará obligado a venir cada lunes y martes al edificio de Comodoro Py. En tanto, Francisco Pafumi, Daniel Lodola y Miguel Werba, directivos de TBA, fueron excusados de asistir por el tribunal por distintas causas.
A su vez, el abogado del grupo de querellantes 1, Gregorio Dalbón, solicitó que se dejara detenido al maquinista Marcos Córdoba y que se cambiara la carátula de “estrago culposo” a “estrago con dolo eventual”, que tiene una pena de hasta 25 años. El Tribunal deberá resolverlo la semana que viene. (Clarín)