23/10/13
"El tren no frenaba bien y las ventanas estaban selladas: ¿Esta es la revolución ferroviara del ministro (Florencio) Randazzo?"
Los familiares de las víctimas de la tragedia de Once lanzaron duras críticas al ministro de Transporte y reclamaron medidas urgentes. "Ya hay 55 muertos y más de mil heridos", dijeron.
Responsabilizaron al ministro por "operaciones de prensa" que "cuenta con genuflexos". "Este Gobierno arroja acusaciones sin fundamento e intenta crear realidades en las que ellos salen indemnes como que haya maquinistas que quieren inmolarse", advirtieron.
"Al ministro (del Interior y del Transporte)´lo tienen harto' los trabajadores que luchan por lo que consideran justo amparados por sus derechos como trabajadores que el Ministro parece ignorar. A los ciudadanos de a pie, en cambio, nos harta ver declaraciones altisonantes en lugar de acciones que prevengan desastres, nos hartan los negociados del gobierno con las empresas concesionarias de los servicios, nos harta ver la gira del ministro por China hablando de los trenes mientras el hacinamiento cotidiano es insufrible", alertaron.
"Después de 9 años de corrupción y negociados de este gobierno nos arrancaron a 52 inocentes, recién ahí el Ejecutivo comenzó con algunas mejoras. La realidad nos ha dado la razón en Castelar y ahora en Once. La definimos como tragedia aunque no haya muertos", dijeron. "No son necesarios cadáveres para vivir un desastre", recalcaron.
"Justicia no es solo ver a los responsables cumpliendo sus penas. Jamás estaremos en contra de las mejoras, pero no somos como ellos (por el Gobierno) que la realidad es lo que les gustaría no lo que está pasando", advirtieron.
Paolo Menghini, papá de Lucas que murió en la tragedia de Once, inició y cerró el acto pidiendo Justicia. Al finalizar, en contacto con la prensa reclamó al Gobierno que "trabaje para prevenir" accidentes ferroviarios para "no volver a llorar muertos y heridos".
Menghini aseguró que "toda la estructura está colapsada, debe trabajarse en todos los estamentos. La responsabilidad del Estado es ineludible".
"Hay que trabajar para prevenir y no volver a llorar muertos y heridos", insistió. (TN)