31/07/13
¿Cuántos muertos más tienen que haber para que mejoren los trenes?
Especialistas hablaron con Hoy sobre los cambios que tiene que haber en el sistema ferroviario para que los vagones no se conviertan en ruletas rusas
Subirse a un tren en Argentina ya no implica lidiar “solamente” con el hacinamiento, las impuntualidades o con el pésimo estado de los vagones. En los últimos tiempos, los usuarios –en su mayoría trabajadores- se enfrentan también a la posibilidad de no llegar a destino, y que la desidia K los deje atrapados entre hierros retorcidos. Los temores no son infundados: nada indica que después de los tremendos choques que dejaron un saldo de más de 60 muertos en los últimos tres años (en Flores, Once y Castelar), el panorama cambie. Aunque las propuestas, que el oficialismo no quiere escuchar, no faltan.
El fin de las sociedades “anónimas”
Los expertos afirman que para que no haya más muertos en las vías, tiene que haber cambios estructurales en el gobierno nacional: en principio, debería dejar de ver en el Ferrocarril una oportunidad para hacer negocios con amigos: el problema de las famosas concesiones.
El Ingeniero Ferroviario Norberto Rosendo, de la ONG Salvemos al Tren, afirmó a Hoy que esto es una cuestión de fondo: “no se deben crear sociedades anónimas, que sólo sirven para maximizar el afano. Hay que armar es una empresa estatal única, con el control de los usuarios y los trabajadores”. Un ejemplo de esta problemática es “la falsa nacionalización del Ferrocarril Belgrano: hicieron una S.A, que no está obligada a hacer balances ni registros contables. Si no salimos de ese esquema, estamos complicados para generar un ferrocarril eficiente y que le sirva a la gente”.
Menos amigos y más especialistas
La falta de seguridad en el manejo operativo de las empresas es otra falla que puede causar muertes, sobre todo cuando la experiencia ferroviaria de estos “amigos del gobierno” es escasa o nula. “En el mejor de los casos son empresas de ingeniería, y en el peor son comerciales” comentó Rosendo.
En este sentido, el Ingeniero Ferroviario Élido Veschi (de la Asociación de Personal de Dirección de Ferrocarriles Argentinos) le dijo a Hoy que el gobierno “mete gente amiga que no sabe y que hace negocios” en las concesiones. “Y como si mete la pata no hay sanción social ni política, el tipo se va a la casa tranquilamente habiendo destruido un patrimonio descomunal. En tanto se sigan manejando con esta noción de amistad y no se responsabilice a nadie por los resultados, esto va a seguir así”, sostuvo.
Mientras tanto, no se cumplen los protocolos de mantenimiento. El resultado: la tragedia. “Después viene el discurso, seguido de las compras: el país va gastando millones de manera absurda. Lo único que se hace es adquirir material, sin estudiar profundamente cuál es el plan de recuperación del sistema ferroviario nacional”.
La revolución que nunca llega
La compra de vagones chinos son espejos de colores. “Se está reemplazando material viejo, que tendría que servir si se hubiese hecho el mantenimiento necesario, por uno nuevo que en el futuro tendrá los mismos problemas que tenemos hoy” dijo a Hoy Élido Veschi (foto), Ingeniero Ferroviario de la Asociación de Personal de Dirección de Ferrocarriles Argentinos. El sistema de trenes “es muy complejo, abarca la operación general y especializada, el desarrollo de tecnología y la formación de recursos humanos” resumió Veschi, quien agregó que “la historia de la corrupción que existe alrededor de las concesiones, y el alejar de la conducción a la gente que sabe algo de trenes, es una suma explosiva”.(HOY)