10/12/12
El tren de carga y la ruta 34, postergados
Productores y comerciantes remarcaron el carácter económico del tren como un transporte de carga de bajo costo.
Sin lugar a dudas, dos obras demoradas en el tiempo son la reactivación definitiva del ramal C 14 y el arreglo de la paupérrima ruta Nacional 34. La primera porque bajaría el costo del traslado de los fletes del norte del país a los puertos en comparación con los camiones que hoy monopolizan el transporte, y el segundo, la ruta 34, porque es una arteria principal de la red troncal nacional, el más importante corredor que vincula al noroeste del país con la zona de los puertos.
En tal sentido la senadora nacional Sonia Escudero manifestó que “el presupuesto aprobado para el próximo año, el cual votamos en contra junto al senador Juan Carlos Romero, viene reproduciendo de hace muchos años la desigualdad geográfica de Argentina. Si no hay inversiones en infraestructura para el desarrollo y solamente planes sociales para el norte argentino, la distancia entre la Pampa Húmeda y el Norte Grande va a ser abismal”.
En ese aspecto dijo que “nosotros insistimos en la reactivación del Ferrocarril Belgrano, pero hasta que se concrete es importante la reducción de los costos, porque estamos en una zona productora y tenemos que pagar fletes altísimos en comparación con lo que es la Pampa Húmeda que está al lado del puerto. Obviamente, las diferencias son muy grandes y en zonas donde la pobreza y el desempleo pegan con más fuerzas”.
“Se habla de industrialización, pero para que haya industria necesitamos beneficios impositivos para que re radiquen, pero también las obras de infraestructura que van a generar y acompañar ese desarrollo”, concluyó.
Total abandono
La ruta nacional 34 está abandonada en su extensión por la provincia de Salta y en especial el tramo que une Rosario de la Frontera con Metán, altamente transitada por camiones, altas velocidades, pocos controles viales, baches tapados con brea, trabajos precarios, accidentes reiterados, peligro de muerte latente, cruces peligrosos, cruces sin iluminación y un Estado nacional totalmente ausente.
Más allá de todo, la inexistencia de una concesionaria que trabaje seriamente en el mantenimiento del tramo asignado y un Estado nacional que haga que se cumpla el contrato, son las principales causas que afectan a esta ruta. (El Tribuno)