30/08/12
La crisis del Sarmiento: Las obras se demorarían más allá de los 60 días previstos
La suspensión del servicio nocturno y de los domingos del ferrocarril Sarmiento comenzó el 30 de julio, por el plan de renovación de vías anunciado por el Gobierno nacional. Según se aseguró, para fines de setiembre se iban a terminar las tareas más urgentes y volverían a correr los trenes. Sin embargo, los plazos podrían extenderse. Un grupo de trabajadores de la línea denunció que sólo se están arreglando 100 metros de tendido por día , con lo cual sería imposible terminar a tiempo. Así lo dijo Rubén “Pollo” Sobrero, referente de la lista Bordó de la Unión Ferroviaria, una línea interna opositora a la conducción del gremio. Esta misma agrupación anunció un paro y una asamblea para mañana , en la que se definirán las medidas de fuerza de la semana próxima, que incluirían un paro el martes. “Nos estamos quedando sin trenes” , aseguró Sobrero. El plan de obras en el Sarmiento fue anunciado el 17 de julio por el ministro Florencio Randazzo, a poco de hacerse cargo del Ministerio de Interior y Transporte. Informó que se iban a invertir $ 800 millones en mejoras como renovación de vías y formaciones, y en la rehabilitación de estaciones y talleres. Según dijo entonces, las suspensiones de servicios afectarían a un 5% del total de pasajeros. A cambio, habría un servicio de colectivos gratuitos para unir la Ciudad con el oeste del GBA. Desde el primer momento surgieron dudas. Dos días después del anuncio, Clarín publicó una nota en la cual diferentes técnicos consultados señalaban que 60 días para las obras eran insuficientes y advertían que era probable una prolongación de los plazos. Por lo pronto, hoy las vías se están reemplazando en sólo dos de los 52 pasos a nivel que tiene el tendido, los que están a la altura de las calles Donato Alvarez y Condarco, además de en las cercanías de las cabeceras de Once y Moreno. Se trata, además, de obras que ya venían demoradas. El plan fue anunciado originalmente en 2005, pero el contrato se firmó en 2008, con las empresas Iecsa y Comsa. Las obras comenzaron y, según el delegado Sobrero, en ese momento se cambiaban “250 metros de vías por día”. Pero se frenaron porque la inflación dejó desactualizados los precios convenidos. Si se hubiera cumplido el anuncio, las vías debían haber quedado totalmente renovadas a fines de 2010. Con las señales tampoco hay avances. El mismo lunes 30 en el que dejaron de circular los trenes de noche, el Gobierno anuló un contrato que había firmado en 2006 con la empresa Siemens para la renovación del sistema de señales. La firma alemana había comenzado a trabajar en 2007, pero tras hacer sólo el 4% de las obras las detuvo, porque la Nación no sólo no readecuó precios por la inflación; tampoco reprogramó las tareas. Si se hubieran terminado los trabajos a fines de 2011, las nuevas señales hubieran estado activas para la época de la tragedia de Once, lo que podría haber contribuido a evitar el accidente. Por el lado de los trenes aún no se observan mejoras. “De las 24 formaciones que teníamos ahora hay 14”, denunció Sobrero. De hecho, tal como publicó Clarín ayer, el Gobierno sacó de circulación todos los servicios diferenciales y a la formación de doble piso que unía el tramo Once-Mercedes. Esta información motivó una crítica de Randazzo a este diario: “Es lamentable la información de Clarín. Parece que no pueden dar noticias positivas como el plan de inversión”, aseguró. Sin embargo, el ministro no explicó cuáles serían, según su criterio, las informaciones incorrectas, ni tampoco qué pasa con esos trenes. Por otra parte, Clarín publicó oportunamente todos los anuncios realizados por el Gobierno. Ayer se informó que hoy a las 11 Randazzo hará un anuncio sobre el SUBE. Tanto el Sarmiento como el Mitre eran operados por TBA. Luego de la tragedia de Once, la concesión quedó en manos de una Unión Transitoria de Empresas (UTE) formada por Ferrovías y Metrovías. Claudio Cirigliano, presidente de TBA, está procesado en la causa por dádivas al ex secretario de Transporte Ricardo Jaime. También fue indagado por la tragedia de Once. Ayer, Carlos Lluch, abogado que está imputado y tiene una estrecha relación con Cirigliano, pidió la recusación del juez Claudio Bonadio porque considera que actuó de manera imparcial. (Clarín)