19/07/12
Ferrocarril Sarmiento: dudas por el plan de obras anunciado por el Gobierno
El programa de inversiones por $ 800 millones que el Gobierno anunció para mejorar el ferrocarril Sarmiento presenta más dudas que certezas . A sólo 12 días de que se inicien las obras prometidas por el ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, lo único que está definido es que s e levantarán los trenes nocturnos entre Once y Moreno y que los domingos no habrá servicios entre Liniers y la terminal porteña del Sarmiento. Más allá de la comunicación general de Randazzo, hasta ayer nadie del Gobierno ni de la nueva concesionaria de la línea pudo precisar cuáles son las obras que forman parte del programa y en qué tiempo se ejecutarán cada una de ellas. Tampoco estarían garantizados los recursos presupuestarios para poner en marcha los trabajos, ni la dependencia que procederá a licitar y contratar las obras en danza. Según señaló el ministro, el plan contempla obras destinadas a atacar cuatro frentes críticos: el estado de las vías, el sistema de señalamiento, las formaciones ferroviarias y la rehabilitación de talleres y estaciones. Pero lejos de explicar cómo se van a resolver los problemas específicos de cada arista del servicio, el anuncio no hizo sino acrecentar la incertidumbre sobre las demoradas inversiones que requiere el ferrocarril Sarmiento. Por el lado las vías, no está claro si la intención del Gobierno es retomar las obras que están paralizadas por falta de pago entre Once y Castelar o anular ese contrato y licitar un arreglo más acotado para el trayecto crítico Once-Liniers. En cualquier caso, los técnicos del sector consultados por Clarín advirtieron: “La ventana de 60 días que dejará el levantamiento de servicios resulta exigua para poder realizar los arreglos de fondo que requieren las deterioradas vías del Sarmiento”. Y agregaron: “O estamos ante un trabajo muy superficial o la real intención del Gobierno es prolongar ese plazo sin decirlo por ahora para no irritar a los usuarios”. Por el lado del señalamiento, las dudas surgen ante los dichos de Randazzo de que en 90 días se iba a llamar a una licitación para renovar todo del sistema. La instalación de una nueva red de señales automáticas ya se adjudicó a fines de 2006 a la empresa alemana Siemens, que embolsó un anticipo de $ 51 millones . A mediados de 2009, tras haber realizado el 4% de la obra, la empresa decidió parar las tareas por la falta de respuesta del Gobierno a sus reclamos de actualización de precios. Con respecto a los trenes, no se sabe qué va a pasar con los contratos que están frenados por la demora registrada en la redeterminación de los precios de las obras. En esta situación se encuentran dos convenios clave: uno que involucra la modernización de 70 coches Toshiba y otro que prevé la fabricación de las 19 formaciones Doble Piso que están pendientes del contrato inicial firmado en 2007 por un total de 25 trenes. Otra cuestión que genera dudas es la vinculada con las partidas presupuestarias y los entes que contratarán la obras. El acuerdo de operación que firmó el Gobierno con la nueva concesionaria del Sarmiento (la UGOSM, integrada por Metrovías y Ferrovías) establece dos condiciones que aún no se cumplieron . Por un lado, una separación de obras entre la operadora y la empresa estatal ADIF. Y por otro lado, un anticipo de $ 150 millones para la cuenta fiduciaria de obras que todavía no fue girado por el Gobierno. (Clarín)