03/01/11
Roca: blanquean desde hoy a 1.000 tercerizados
Desde hoy, unos 960 trabajadores contratados hasta diciembre en pymes y cooperativas tercerizadas del Ferrocarril Roca pasarán a ser personal en relación de dependencia de una repartición que puede considerarse «semipública»: la Unidad de Gestión Operativa Ferroviaria de Emergencia (UGOFE), formada por empresas privadas, pero financiada totalmente por el Estado. A partir de este mes, los sueldos de estos operarios aumentarán de 2.000 a 4.000 o 5.000 pesos mensuales, a los que se les deberán sumar las horas extras que trabajen.
En otras palabras, pasarán de ser empleados casi en negro (en algunos casos en irregularidad total) a tener los beneficios de los trabajadores ferroviarios en relación de dependencia. Además, y dentro del aspecto potencialmente más conflictivo del movimiento, podrán sindicalizarse y comenzar a militar en el gremio de la Unión Ferroviaria (UF) que maneja desde hace décadas José Pedraza, y, eventualmente hasta presentarse a internas contra el histórico dirigente hoy moyanista. De ser así, militantes del Partido Obrero podrán disputarles la conducción (al menos en el Roca) a los afiliados fieles de Pedraza. Curiosamente, una patota vinculada a este gremio sería, según la investigación judicial, la acusada de asesinar en octubre pasado a Mariano Ferreyra, militante del PO y ferroviario tercerizado del Roca. Según fuentes oficiales, desde el Ministerio de Trabajo de Carlos Tomada ya están completos casi todos los informes preliminares y trámites burocráticos (firma de papeles, exámenes médicos, presentaciones de lugares de operaciones laborales) para que desde hoy escalonadamente vayan integrándose al Roca los nuevos empleados. La mayoría continuará con sus tareas anteriores, pero con nuevas conducciones y jefaturas. Incluso se menciona que varios de los antiguos operarios tercerizados pasarán desde ahora a revistar como capataces de anteriores compañeros. En todos los casos, los sueldos mensuales serán liquidados por la UGOFE, que como ocurría antes de estos movimientos laborales, liquida sus salarios a partir de las partidas mensuales que llegan desde el sector público. Esto quiere decir que será el Estado con los recursos fiscales el que desde ahora aporte el dinero para los sueldos mensuales de los nuevos trabajadores en relación de dependencia del Ferrocarril Roca. La parte privada de la UGOFE, que es una Unión Transitoria de Empresas (UTE), tiene a su cargo la administración y manejo técnico de este servicio, pero no aporta dinero. Los socios privados son TBA (familia Cirigliano), Metrovías (Roggio) y Belgrano Norte (familia Romero). Como esta UGOFE administra además el San Martín y el Belgrano Sur, se especula que desde hoy habrá protestas de los tercerizados de ambas líneas para ingresar en el mismo beneficio que el Roca. Por esto, desde Trabajo comenzarán a inspeccionar la situación de las pymes y cooperativas que manejan esos servicios contratados para adelantarse a cualquier potencial conflicto que pueda surgir. El mismo proceso podría realizarse en el Mitre (que maneja TBA de Cirigliano). La idea general es intentar solucionar antes de marzo los problemas principales de los tercerizados, al menos en el caso de los ferroviarios y los telefónicos. Con esto, se especula en la Casa de Gobierno, se evitaría que cuando la mayoría de los porteños y bonaerenses vuelva de sus vacaciones estivales y comiencen a retomar su ritmo laboral habitual, vuelvan episodios como el corte de vías en la estación Avellaneda que llevó hace unas semanas al desquicio en la estación Constitución. La aceleración del pase a planta permanente de los operarios del Roca y el avance de las negociaciones con el resto de los tercerizados del San Martín, Belgrano Sur y el Mitre, que encara el Ministerio de Trabajo, es la mitad del programa oficial. La otra mitad corresponde al Ministerio de Seguridad de Nilda Garré, y tiene que ver con el control hacia militantes del PO y el MST. Una estrategia similar se intentará implementar también en el caso de los telefónicos. Un grupo de trabajadores -militantes- tercerizados cortó ya dos jueves seguidos la 9 de Julio con sus propios automóviles, reclamando una «solución» a su situación laboral. También comenzarán inspecciones oficiales en el caso de estos operarios, pero a diferencia de lo que pasa con los ferroviarios, el dinero para el cambio de situación contractual no lo aportaría el Estado. Si esto ocurre, sería una nueva etapa en el conflicto de los tercerizados, ya que la solución del problema no vendría por el aumento del dinero de subsidios públicos sino por la obligación de los privados de cambiar el estatus de estos empleados. (Ámbito Financiero)