13/04/15
Sutes: con cámaras y policías de civil buscan reducir robos
Un grupo de  jóvenes que ingresa a la estación Juramento de la línea D con bolsos y material  listo para pintar los vagones del subte. Son grafiteros, y entre todos logran  controlar a los dos agentes de seguridad privada que custodian la estación. Se  quedan por lo menos una hora y se van.
      
      Febrero, 18.15, una empleada del subte es agredida  por un pasajero que no quiere pagar el boleto y termina empujándola y  alejándose por las escaleras de la estación Constitución. Marzo, 10.26, un  hombre le arrebata la cartera a una mujer en la estación Agüero, pero es  interceptado por los otros usuarios cuando quiere pasar por los molinetes y  escaparse.
  
      Como estas, todas las situaciones que involucren  algún hecho de inseguridad en el subte, ya sea vandalismo, robos o accidentes,  quedarán registradas en las imágenes de las 223 cámaras que Subterráneos de  Buenos Aires (Sbase) instaló en la zona de boleterías y molinetes de las  estaciones, y que desde enero son visualizadas en el primer Centro de Monitoreo  del Subte, en la estación Independencia, donde confluyen las líneas E y C.
  
      La iniciativa, que también se implementa en  ciudades como Londres, Madrid, Barcelona, Santiago de Chile y San Pablo, y tuvo  una inversión de $ 6.654.537, busca no sólo disuadir los delitos, sino que se  pueda actuar en el momento en que se comenten, avisando a la policía o al  personal que se encuentra en las estaciones.
  
  “Las cámaras son un complemento a la llegada de  los 500 policías de la Metropolitana , de la seguridad privada en cocheras y  talleres, y de las veinte boleterías blindadas que ya tenemos”, explica Juan  Pablo Piccardo, titular de Sbase. En los próximos tres meses planean blindar  otras 21 boleterías, y para octubre piensan tener instaladas todas las cámaras,  que serán 1.500, desde donde vigilarán también los  andenes, talleres y  cocheras, que serán monitoreados desde otro centro en Chacarita, al lado del  que tiene la Policía Metropolitana.
  
      Además, a futuro planifican instalar monitores en  las estaciones donde hay más tránsito, como Constitución, Retiro, Palermo, para  que los usuarios puedan ver las imágenes que captan las cámaras en tiempo real.
  
      Desde Sbase sostienen que gracias a este conjunto  de medidas lograron reducir la cantidad de robos en boleterías , que pasó de 35  en 2013 a cuatro en 2014. La disminución de hechos en trenes y andenes, dicen,  es también gracias a la presencia de agentes de la Metropolitana de civil  dispuestos dentro de los trenes, para identificar a quienes utilizan el subte  con fines que no sean el transporte.
  
  “Intentamos evitar la evasión, ya que gran parte de  los pasajeros busca no pagar el boleto, ver que no haya personas en actitudes  extrañas, y alertamos a la Metropolitana ante la presencia de algún ilícito o  actitud sospechosa para que estén alertas”, explica Víctor Torrers, subjefe de  seguridad de Metrovías.
  
      A los colectivos. Entre los usuarios del subte la  percepción es que los delitos vienen en baja. Desde Pungas en Subte, un grupo  de usuarios que denuncia y divulga fotos de pungas desde una cuenta de Twitter,  alertan porque algunos se trasladaron a las paradas de las líneas de  colectivos. Y si bien reconocen que los delitos bajaron en las líneas D y B,  sostienen que ahora la línea C, por la que circulan más de cien mil personas  por día, es la que tiene mayores problemas. (Perfil)
