07/07/14
Ir a trabajar cuesta hasta el doble que el año pasado
Deterioro del  poder adquisitivo Por las subas de colectivos, subte, nafta, peajes y taxis, la gente gasta hasta  25% de su sueldo en transporte. Tomar dos colectivos desde el Conurbano a  Capital pasó de $ 175 a $ 330 por mes
      Los aumentos en el valor de colectivos, nafta, peajes,  subte y taxis que se dieron en los últimos meses provocaron que a los  asalariados se les vaya hasta un 25% de sus ingresos en ir de la casa al  trabajo. 
      El  gasto en viajes, que podía representar entre 5 y 6% de un sueldo mínimo  en 2013, este año ya es el doble. Y, si se trata de personas que viven  en barrios sin colectivos directos a Buenos Aires, el esfuerzo económico en  llegar al puesto de trabajo es aún mayor.
      Aunque  los más afectados por las alzas en transporte son quienes cobran sueldos  mínimos o se desempeñan en la economía informal, el encarecimiento para llegar  al trabajo alcanza a todos los que vienen del Conurbano en auto y, en menor  medida, a los que viajan sólo dentro de la ciudad de Buenos Aires.
      Un  trabajador que va del centro de Florencio Varela hasta la ciudad de Buenos  Aires en el colectivo 148 pagaba, a fines del año pasado, un boleto de $ 2,35  (del Conurbano a la Capital). En la mayoría de los casos, tenía que tomar un  segundo transporte, que le costaba $ 1,60 (para ir desde Constitución hasta  otro barrio porteño, a 30 cuadras de distancia). Entre ida y vuelta, cada día destinaba  $ 7,90 a transportarse. Ahora, esos mismos dos viajes le cuestan $ 7,25 ($  4 del Conurbano a Buenos Aires y otros $ 3,25 para viajar en la ciudad) y por  día se le van $ 14,50.
      Hasta  2013, el traslado hacia el trabajo le costaba a ese trabajador alrededor de $  175 mensuales (22 jornadas en un mes), lo que representaba un 5% de un  salario mínimo de $ 3.300. Ahora, saca de su bolsillo $ 330, casi un 9% del mínimo vigente de $ 3.600. A esa cifra hay que agregarle $ 1 cada vez que  se recarga la tarjeta SUBE (que tiene un máximo de $ 300, por lo cual hay que  actualizarla, como mínimo, dos veces en un mes).
      Si  la persona vive en un barrio del Conurbano que no está cerca de un ómnibus que  llegue a la Capital, los costos crecen. Un “tercer” viaje en colectivo –de su  barrio hasta la terminal de la línea– le implicaban $ 3 diarios más en 2013,  que ahora son $ 6. En ese caso, se le iba un 7% del sueldo mínimo en  2013 en viajar, y ahora destina 12,5% de su ingreso a ese concepto.
      El  Gobierno puede argumentar que los sectores que cobran “mínimos” pueden usar el  tren, cuyos precios son los mismos que en 2013 para la mayoría de las líneas.  Sin embargo, los que están cerca de los ferrocarriles pueden poner objeciones:  los vagones del Roca –que va a Berazategui, por ejemplo– son diésel, están  sucios y requieren de seguridad privada para evitar los robos. En el Mitre –que  va al conurbano norte– hay boleterías (como Lisandro de la Torre) que ni siquiera  están abiertas. En el Sarmiento, hacia el Oeste, la tragedia de Once dejó miedo  en los pasajeros.
      Una  persona que viaja del conurbano norte (Tigre) hacia Buenos Aires gasta un  tanque de nafta semanal de 45 litros y tiene que pagar dos peajes: el del acceso  Norte y la autopista Illia. En diciembre, cargar el tanque con súper le insumía  $ 1.501, ya que el combustible estaba a $ 8,34 por litro. Ahora, la nafta  necesaria para hacer los mismos viajes le sale $ 2.061, es decir un 37% más. 
      Durante  el año pasado, los 4 peajes en hora “pico” ($ 13 cada uno en el Acceso Norte y  $ 5,50 en la Illia), le costaban $ 814 mensuales, mientras que este año le  están demandando $ 1.012. El pase en el acceso Norte subió a $ 16 y en la  Illia, a $ 7. El gobierno porteño propuso llevar ese valor a $ 10 en agosto.  Pero aún antes de ese incremento, los peajes son 24% más costosos que en  2013.
      Según  la consultora CCR, una personas de clase media “típica” ganaba entre $ 6.700 y  $ 12.000 en 2013. A mitad de camino, el que cobraba $ 9.350 en diciembre dejaba casi un 25% de sus ingresos ($ 2.315) en transportarse en auto. Este  año, le sale $ 3.073 mensuales realizar el mismo desplazamiento, es decir un  32,7% más que a fines de 2013. Si su sueldo creció menos del 33% a julio,  le está destinando mayor parte de su trabajo a transportarse que en 2013.
      El  que menos parece estar sufriendo los aumentos es el que viaja dentro de la  ciudad en subte.
  El  pasaje subió un 28%, de $ 3,50 a $ 4,50, pero hay quienes  pueden conseguir una tarifa menor a $ 4 si demuestran que hacen dos viajes  diarios durante 20 días.
      El taxi también se convirtió en un viaje que, del  centro a la mayoría de los barrios, supera los $ 100. Si un pasajero lo toma en  el Obelisco y se dirige a Cabildo y Juramento, no le alcanzará un billete de la  máxima denominación. Lo mismo le pasa si va a Flores, Pompeya, Mataderos,  Paternal, Villa Devoto, Saavedra, o cualquier recorrido que exceda las 70  fichas. Si es de noche ($ 15,18 por bajada de bandera y $ 1,52 por cada ficha),  casi cualquier destino que supere las 30 cuadras le demandará no menos de $ 50.  (Clarín)
