03/06/13
Con menos servicios en el subte, se amplían las demoras en horas pico
De  un lado está la empresa Metrovías, que argumenta que los coches salen de  circulación porque deben ir a taller para ser reacondicionados. Del otro lado,  los metrodelegados, que denuncian menos servicios en hora pico, falta de  mantenimiento en estaciones y coches, y que los pasajeros los agreden por las  demoras y otros inconvenientes. Y en el medio, los usuarios, que padecen  demoras y peores condiciones de la red de subterráneos. Se siente sobre todo en  las líneas C y D, donde se quitaron dos formaciones de cada ramal. Eso implica,  según advierten los trabajadores, que el servicio que une Catedral con Congreso  de Tucumán, por ejemplo, tenga 20 vueltas menos y que la frecuencia se estire  de 3 a 5 minutos.  Parece poco pero esos  dos minutos recargan los coches en hora pico y los trenes salen repletos desde  las cabeceras. No es un dato menor: hoy se calcula que 900.000 personas usan a  diario las seis líneas de subte y el Premetro, y que solo la línea D, que tiene  conexión con la B y la C, transporta unos 280.000 pasajeros por día. Es la  segunda en el ranking después de la B, que promedia los 286.000. Desde hace  pocas semanas en vez de tener 21 formaciones funciona con 19, y eso puso en  alerta a los metrodelegados. Para la C el recorte afecta a 176.800 personas.  “Se viaja y se trabaja peor. En los papeles  dicen que de las 21 formaciones que tienen que circular ahora habilitan a que  corran 19, pero a veces no llegamos ni a eso, y menos los fines de semana.  Estamos viendo un achique de la empresa, en sectores como taller no hay  personal, igual que en las boleterías, que cierran porque no hay quien atienda.  Ahora denunciamos la quita de coches y servicios porque eso trae problemas de  frecuencia y a nosotros nos enfrenta con la gente que está esperando en el  andén. Hay casos de compañeros agredidos”, sostuvo Norberto Pianelli,  secretario general de la Asociación Gremial de los Trabajadores del Subte y  Premetro (AGTSyP).  Para Daniel  Villavicencio, delegado de la línea D, el problema es que los coches que  circulan no alcanzan para dar un buen servicio a la cantidad de gente que usa  ese ramal, que no se cubren empleados que se enferman o están de vacaciones y  que hay fines de semana que se empiezan con tres trenes en vez de ocho. “La  frecuencia se alarga de 3 a 5 minutos, siempre y cuando no haya problemas que  obliguen a parar la formación, cuando puede haber retrasos de diez minutos o  más”, advirtió. Y agregó: “Hoy las formaciones salen repletas. Exigimos  mantenimiento; a veces sacamos servicios con el parabrisas sucio, o sin  matafuegos”.  Desde la empresa Metrovías  sostuvieron que la quita de coches forma parte de un plan de  reacondicionamiento, desmintieron que sea una reducción de costos y aseguraron  que los coches que se retiraron necesitaban reparación. También aclararon que  este plan no se extenderá a otras líneas.   Desde Subterráneos Buenos Aires Sociedad del Estado (Sbase), el área del  Ejecutivo que maneja la relación con la concesionaria, también explicaron que  el recorte de servicios “se debe a una inversión en mantenimiento que se hace  ahora en coches que hacía años que tenían que ir a taller ”.  Si bien los servicios vienen siendo  recortados desde hace días, los Metrodelegados empezaron a repartir el viernes  un volante que advierte que ese ajuste regirá desde hoy. La pelea tiene un eje  central y es una reunión prevista para este jueves en la subsecretaría de  Trabajo de la Ciudad, donde los delegados de AGTSyP pedirán que Metrovías  “mejore las condiciones laborales”. Entre otras cosas, intentarán reclamar más  seguridad para el subte. (Clarín)
    
