22/01/13
El subte puede complicar la elección a Macri
La suerte electoral del macrismo es una cuestión de tiempo. Al menos en lo que se refiere al transporte. La construcción del metrobús y las reformas en el servicio del subte serán el caballito de batalla de PRO de cara a los comicios legislativos, siempre y cuando el Gobierno porteño consiga cumplir con los cronogramas establecidos. En caso contrario, las dificultades para circular que generan las obras y el cierre de la línea A, más el incremento tarifario, aumentarán el malhumor entre los potenciales votantes de los candidatos macristas, analizan en Bolívar 1. Aunque asegura que la peor parte se terminará con el verano, el subsecretario de Transporte porteño, Guillermo Dietrich, ya adelantó que la construcción del metrobus en la Avenida 9 de Julio, que unirá las zonas de Constitución y Retiro, recién finalizará en el segundo semestre de este año, pero no precisó si eso será en agosto o diciembre. No obstante, en PRO apuestan a que las obras finalicen antes de las elecciones legislativas de octubre, inclusive si la administración de Mauricio Macri adelanta los comicios porteños. En tanto, la instalación del metrobús en el corredor Sur, que unirá Constitución con puente La Noria, comenzó en octubre pasado y se prevé que finalice en mayo, un mes antes de la fecha en la que podrían realizarse las elecciones porteñas en caso de que se anticipen. “Nos van a llover las críticas con la construcción de los nuevos metrobuses. Lo importante es que eso no repercuta en las elecciones. Para eso tenemos que lograr que las obras queden lo más alejadas posible de la fecha de votación”, analizó una importante fuente del Gobierno porteño. Todo indica que ese objetivo está asegurado en la línea A del subte, que permanece cerrada por obras desde el 12 de enero y volverá a abrir sus puertas el 1 de marzo. El macrismo no sólo lucirá con orgullo los 45 nuevos vagones, que compró el Gobierno nacional, sino que además tiene previsto inaugurar las cinco estaciones (Echeverría y Rosas, en la línea B; San Pedrito y Flores, en la A; y Hospitales en la H) que están terminadas hace tiempo. Como contracara, casi para la misma fecha, se llevará adelante la audiencia pública para discutir el aumento del precio del boleto de subte, de $ 2,50 a 3,50. Si bien la oposición y los metrodelegados adelantaron su disconformidad con la medida dispuesta por Macri, Dietrich señaló que el incremento tarifario es una decisión tomada, a la vez que no descartó un nuevo aumento para más adelante. Eso mismo es lo que dejó en claro el viernes pasado en la reunión que mantuvo con el ministro del Interior y Transporte de la Nación, Florencio Randazzo, quien cuestionó con dureza la decisión de la administración macrista. Más allá de la suba del boleto de subte, por primera vez, el Gobierno porteño deberá hacerse cargo de los diversos reclamos sindicales, algo que le preocupa con demasía, y llevar a buen puerto la discusión paritaria con la Unión Tranviarios Automotor (UTA), pero sobre todo con la Asociación Gremial de Trabajadores del Subte y Premetro (AGTSyP).
- Mauricio Macri quiere tomar como caballito de batalla el transporte para mostrar que puede gestionar la ciudad de Buenos Aires, como eje de la campaña legislativa del PRO este año.
- Además de los cambios en la línea A del subterráneo, que provocó un cierre temporal de la línea, apuesta a inaugurar nuevas estaciones.
- En forma complementaria, trabaja en forma acelerada para construir el metrobús de la avenida 9 de Julio que unirá Constitución y Retiro, y el corredor Sur, de Constitución al Puente de la Noria. (Buenos Aires Económico)