21/11/12
Subte: definen la ley marco
La mesa chica del macrismo resolvía anoche detalles del proyecto de ley del traspaso del subte, que se concretaría el 1° de enero próximo, cuyo texto sería enviado a la Legislatura porteña entre mañana y el lunes. Por lo pronto, el 90 por ciento del proyecto ya estaba escrito y el eje central es la posibilidad de un llamado a licitación para elegir otros operadores para el servicio, la posibilidad de una estatización, mayores exigencias para quien esté al frente de la concesión y ocho alternativas posibles, algunas de ellas combinadas, para financiar el gasto operativo de la red: 1054 millones de pesos anuales. El oficialismo espera conseguir créditos blandos internacionales que aporten los fondos necesarios a largo plazo para modernizar y ampliar la red, así como para renovar la flota de trenes, que transporta un millón de personas por día. El esquema tarifario, especulan en Pro, estará atado a la evolución de los recursos y un nuevo aumento será realidad en el futuro, más aún si se concreta la suba en el boleto de trenes y colectivos, prevista para dentro de los próximos tres meses. El texto de ley que escribe el diputado de Pro Martín Ocampo, presidente de la Comisión de Justicia de la Legislatura porteña, viaja por correo electrónico hasta el despacho de Mauricio Macri, en Bolívar 1, entre una y dos veces por día. Si bien la administración porteña sólo está dispuesta a firmar un acuerdo con la Nación que incluya la transferencia de partidas presupuestarias para financiar los costos operativos mensuales, en el fondo creen que se trata de un "imposible". Y entre las variables para obtener los fondos se inscriben la reasignación de partidas presupuestarias recortando obras públicas, el aumento en los peajes y la creación de un impuesto al combustible, de entre 20 y 40 centavos por litro, ajustable cada año, entre otras. Una opción que se analizó, pero que se habría descartado, es el recorte salarial en las dietas de funcionarios con rango ministerial. Más allá de la contemplación de un llamado a licitación o bien de una posible "estatización" del subte, dirigentes de Pro admitieron que en un contexto de buenas relaciones con el gobierno nacional se extendería por un tiempo el contrato de concesión entre la Casa Rosada y Metrovías -vigente hasta 2017-, pero a nombre de la Ciudad. Y en ese lapso evaluar su desempeño, mientras estudiarían otros posibles oferentes. Aunque en el ámbito local el macrismo casi descarta que haya otros operadores que cumplan con sus expectativas para "mejorar" el crítico servicio del subte. (La Nación)