23/10/12
En la Ciudad creen que Macri asumirá la red
El frustrado traspaso de competencias en el subte porteño debería quedar resuelto antes de fin de año, luego de que el 3 de enero pasado se firmó un acuerdo entre la Nación y la Ciudad y que, poco más tarde, el propio Mauricio Macri, jefe de gobierno local, rechazó. Según fuentes de la Casa Rosada y de la Ciudad, ambas coinciden en que "tarde o temprano" Macri asumirá el control del servicio, aunque por estas horas unos y otros siguen sin admitir ese compromiso. Algunos avances hubo: ambos coinciden en que no podrá repetirse otro año de incertidumbre sobre quién está a cargo de la red. Pero el acuerdo todavía se dilata. Y el escenario no ayuda: en diciembre próximo, los delegados del subte discutirán las paritarias, mientras que desde enero venidero la concesionaria Metrovías ya no recibirá más subsidios del Estado nacional. Una posibilidad, entonces, es que el boleto, que hasta el 3 de enero pasado costaba $ 1,10 y tras la breve intervención de Macri pasó a $ 2,50, termine por costar el doble. Un círculo de funcionarios cercanos a Macri apoya la idea de que la Ciudad se haga cargo del subte; el jefe de gobierno es el más reticente. El ministro de Hacienda porteño, Néstor Grindetti, ya dijo que para 2013 la Ciudad no prevé presupuesto para el subte. "Para que se incorpore una partida, previamente la Legislatura tendría que aprobar la transferencia, y eso no ocurrió. No hay dinero para el subte porque no tenemos esa concesión", dijo Grindetti. En las negociaciones por el traspaso, la Ciudad puso como requisito que la Nación le transfiriera 10.000 millones de pesos por inversiones para la red que nunca se hicieron, más $ 4000 millones para los gastos operativos del servicio. La Casa Rosada rechazó la exigencia. La segunda oferta de la mesa chica del macrismo fue que la Ciudad absorbiera el gasto operativo del servicio siempre y cuando la Nación le cediera el 20% de aquellos $ 10.000 millones ($ 2000 millones) y firmara los avales para un crédito por los $ 8000 millones de pesos restantes. Esa oferta no fue respondida por el gobierno de Cristina Kirchner. Consultado sobre si la Ciudad iba a aumentar el boleto en 2013 ante la falta de presupuesto prevista para el subte, el ministro Grindetti dijo: "Eso lo tendría que decidir el gobierno nacional". En tanto, en la Casa Rosada se encogieron de hombros. Voceros del ministro del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, indicaron que la Nación "ya no tiene responsabilidad sobre el subte". El plan B del macrismo para aceptar el manejo de la red es, por un lado, subir la tarifa a 5 pesos y, por el otro, discutir subas en los peajes o en las patentes de vehículos para cubrir el gasto adicional. (La Nación)