22/08/12
Subtes: cómo usar mal el derecho de huelga
En lo que va del año, el Ministerio de Trabajo de la Nación ha publicado más de mil quinientos acuerdos salariales de distintas actividades, y con distintas partes. Esto quiere decir que hubo exactamente la misma cifra de negociaciones exitosas entre trabajadores y empleadores. En ninguno de los casos hubo una huelga que se utilizara como presión para dichas negociaciones que haya durado diez días, como el conflicto entre Metrovías y los metrodelegados. El derecho de huelga, como todo derecho, no es absoluto sino que está inserto en un sistema legal e impacta sobre una sociedad. Por lo tanto, requiere de ciertas condiciones de ejercicio. Es imperativo que quien busca ejercerlo esté motivado por un conflicto realmente laboral y no político partidario. Del mismo modo es preciso que las partes tengan por objetivo mantener la paz social y jamás poner en riesgo la vida, la seguridad, o la salud de las personas afectadas , al tiempo que respetan las condiciones de negociación, las medidas de conciliación voluntaria u obligatoria. Además, si se trata de un servicio esencial, o de uno que de interrumpirse indefinidamente pueda volverse esencial, los huelguistas no deben entorpecer la prestación de un servicio mínimo que satisfaga aunque sea precariamente los movimientos críticos. Como ha quedado expuesto, la conducta de los metrodelegados no ha cumplido con ninguno de estos puntos, que no surgen de la particular visión que pueda tener el Gobierno de la Ciudad, sino de las condiciones de ejercicio que son principios de la OIT sobre el Derecho de Huelga, conforme el documento que esta oficina internacional del trabajo ha publicado en el año 2000, tras haber discutido su texto entre representantes de todo el mundo de trabajadores, gobiernos y empleadores. Afortunadamente, la autoridad administrativa del Trabajo de la Ciudad logró acercar a las partes y, al menos transitoriamente, garantizar que el subterráneo, que transporta a un millón de personas diariamente, hoy funcione. (Clarín)