06/08/12
El boleto sin SUBE ya subió
Los que no utilicen la tarjeta electrónica ya deben pagar el boleto mínimo de colectivo a 2 pesos y el de tren a 1,50. La Secretaría de Transporte informó que la SUBE se puede adquirir por 15 pesos en más de dos mil puntos de venta.
Las tarifas de trenes y colectivos del área metropolitana de Buenos Aires aumentaron desde la medianoche para aquellos usuarios que no tienen la tarjeta electrónica SUBE. Los tramos en colectivo que hasta ahora costaban 1,10, 1,20 y 1,25 pesos ahora cuestan 2 pesos. La suba va del 60 al 81,1 por ciento. Los precios para los recorridos más largos, aquellos que costaban 1,75 y 2 pesos, subieron hasta 4 pesos. El mínimo del tren, que hasta ahora valía 70 u 80 centavos dependiendo del ramal, trepó a $ 1,50, y para los recorridos más largos de 13 a 52 kilómetros la tarifa es de 2 pesos. En ambos casos, ferrocarriles y colectivos, las tarifas más altas llegan hasta 5 pesos. En el caso de las líneas municipales que no tienen SUBE, no habrá cambios en las tarifas.
La Secretaría de Transporte informó que los pasajeros que no tienen la SUBE la pueden adquirir por 15 pesos, y de ese modo seguirán con las tarifas congeladas. Actualmente hay más de 1200 puntos de venta de la tarjeta y unos 4 mil centros de recarga. Unos 11 millones de pasajeros ya tienen su tarjeta SUBE y por día se activan entre 6 y 7 millones. En el gobierno estiman que falta que obtengan su plástico alrededor del 10 por ciento de los pasajeros regulares, aproximadamente un millón de individuos. La decisión de diferenciar las tarifas y “penalizar” a quienes no usen la SUBE busca universalizar el uso de la tarjeta.
A continuación se detallan algunos ejemplos concretos con los precios nuevos que deben pagar en los trenes metropolitanos quienes no usen la SUBE.
- San Martín. De Retiro hasta La Paternal subió de 0,75 a 1,50 peso y si el pasajero va a alguna estación entre Villa del Parque y José C. Paz trepó de 0,90 a 2 pesos. Hacer el recorrido hasta Pilar, la otra cabecera, antes valía 2 pesos y ahora, 4 pesos.
- Roca. De Constitución hasta Wilde en el diesel aumentó de 0,75 a 1,50 peso. Si el trayecto se extiende hasta alguna de las estaciones que están entre Don Bosco y Tolosa la suba es de 0,90 a 2 pesos, mientras que llegar a La Plata antes costaba 2,10 y ahora vale 4 pesos. En el ramal eléctrico, de Constitución hasta Remedios de Escalada trepó de 0,80 a 1,50 peso. De Constitución a cualquier estación entre Banfield y Turdera subió de 1,10 a 2 pesos y de Constitución a Llavallol, Guillón o Monte Grande aumentó de 1,35 a 2 pesos. De Constitución a cualquier estación entre El Jagüel y Spegazzini subió de 1,50 a 2 pesos y si el pasajero va a alguna estación entre Máximo Paz y Cañuelas ahora debe pagar 4 pesos, en lugar de 2 pesos.
- Mitre y Sarmiento. Un pasajero que viaja de Retiro a Tigre y abona en efectivo antes pagaba $ 1,35 y ahora tiene que desembolsar 2 pesos, mientras que para los que van hasta Garín aumentó de 1,85 a 2 pesos. En la misma línea, de Retiro a Capilla del Señor, el recorrido entero, el boleto cuesta 5 pesos. En el Sarmiento, de la estación Once a Moreno el pasaje subió de 1,35 a 2 pesos. De Once a Luján aumentó de 2,65 a 4 pesos.
- Urquiza. Desde Lacroze hasta Villa Bosch el precio subió de 0,80 a 1,50 peso. A partir de Martín Coronado y hasta Lemos, sin la SUBE, llega hasta 2 pesos.
- Belgrano Norte. Entre Retiro y Aristóbulo del Valle el precio pasó de 0,75 hasta 1,50 peso. De Padilla a Villa Rosa, hasta 2 pesos.
En el caso de los subtes, la tarifa aumentó a comienzos de año de 1,10 a 2,50 pesos. El incremento lo dispuso el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y se aplicó a todos los usuarios, con o sin tarjeta SUBE. Por lo tanto, ahora no habrá cambios tarifarios en ese servicio.
“Para el transporte de pasajeros en colectivo de la zona metropolitana se asignan 976 millones de pesos por mes, mientras que en el interior del país son 376 millones mensuales. Eso permite que la gente pague un pasaje mucho más económico. Hoy, un pasajero paga el 25 por ciento de lo que valdría un pasaje en tren o colectivo”, indicó Randazzo poco después de comunicar la suba para quienes paguen en efectivo. De todos modos, el gobierno nacional ya advirtió que mantendrá fijo el subsidio al transporte, y que de ahora en más las administraciones provinciales o municipales deberán decidir si asumen las diferencias que surjan por aumento de costos de las empresas de colectivos o si elevan las tarifas.
Randazzo adelantó también hace pocos días que las tarifas del transporte urbano de pasajeros aumentarán de manera escalonada cuando se universalice el uso de la tarjeta SUBE. La iniciativa, que había sido anunciada a principios de año, permitirá discriminar con el uso de la tarjeta magnética de acuerdo al poder adquisitivo del usuario: quienes tengan ingresos más bajos pagarán menos y quienes cobren más serán subsidiados en menor medida. “Ese es el objetivo que tenemos”, dijo el ministro.
La implementación de la SUBE permite al Estado diferenciar con la identificación de su titular el cobro de la tarifa mediante un cruce de datos y hacer un uso más eficiente de los subsidios al transporte. Además de diferenciar entre usuarios con distintos poder adquisitivo, el cruce de datos permitirá establecer un patrón de viaje del usuario (por ejemplo, si toma diariamente dos colectivos) para que se cobren como un solo tramo, promediando los precios. (Página 12)