24/04/12
Desidia y suciedad, las reinas del subte
Escaleras  mecánicas que no funcionan, ascensores cerrados, andenes sucios y baños  inutilizables. Los usuarios del subte porteño, que pasado mañana volverá a  sufrir un paro del servicio, conviven hoy con el deterioro de la  infraestructura y la desidia en el mantenimiento en varias de las 78 estaciones  que conforman la red. El desalentador panorama se suma a los reiterados robos  en las formaciones y las demoras o interrupciones por fallas operativas o  protestas gremiales.  Los problemas  estructurales del subte son muchos y, pese al aumento del 127% en el boleto  desde enero pasado, no hay planes concretos para que la situación mejore.  En una extensa recorrida que realizó LA  NACION por distintas estaciones de la red, constató las deficiencias edilicias  que más quejas provocan entre los usuarios.   Línea A. "La basura que tenés en los andenes es cotidiana, y hablar  de una estación con baño, bueno... olvidate", dice Eleonora Barthes,  usuaria frecuente de esta línea, que une Plaza de Mayo con Flores. Ayer, en la  estación Congreso una escalera mecánica estaba fuera de servicio en horas de la  tarde.  Línea B. Intentar ir al baño de  damas en las estaciones Alem o Florida es una excursión temible. Ayer, poco  después de las 15.30, en ninguna de las dos había agua, ni para descargar el  depósito del inodoro, ni para lavarse las manos, ni papel higiénico ni toallas  de papel. Tampoco era posible cerrar las puertas de lata y sin picaporte que  separan el baño del estar. El toilette de Florida estaba limpio; en el de Alem  se acumulaban papeles sucios, colillas de cigarrillo y botellas vacías.  "Y cada dos por tres están clausurados o  inundados", protestó la usuaria Marina Gómez.  De los tres ascensores que dispone la línea  B, según el pasajero Leonardo Guzmán, el de la estación Uruguay suele no  funcionar. Ayer, el de Los Incas también permanecía detenido en el nivel de los  andenes.  Línea C. Si la línea B tiene  ascensores que no andan y baños sucios, la línea C directamente carece de esas  instalaciones. "Para ir al baño hay que aguantar hasta Constitución",  dijo el usuario Pablo Giorgi.  En la  víspera, por lo menos entre las 16.45 y hasta las 17.30, quienes viajaban desde  Retiro y descendían en la estación Diagonal Norte, tampoco disponían de la  escalera mecánica para subir desde la C hasta las combinaciones con la D y la  B, porque no funcionaba.  Línea D. Desde  la estación Congreso hasta Catedral, se advierten varias falencias. Las  escaleras mecánicas en las estaciones José Hernández y Pueyrredón ayer no  funcionaban. La primera hace más de un mes que no está activa y la segunda,  unas horas, según contaron los usuarios. Además, los baños de la estación  Olleros estaban impresentables: los inodoros taponados y el olor dificultaba el  ingreso de cualquier pasajero en horas de la tarde. "La escalera de la  estación Hernández no funciona y, cuando la arreglan, anda unos días y después  se para otro mes", se quejó Daniel Osorio, usuario de la línea.  La empresa concesionaria, Metrovías, aseguró  que la escalera de José Hernández se encuentra detenida desde mediados del mes  pasado "por un problema en la guía", mientras que la detención de las  de Pueyrredón (línea D), Congreso (A) y Diagonal Norte (C) respondió a  "cuestiones circunstanciales" que se solucionan con el reseteo del  dispositivo. El ascensor de Los Incas, agregaron, permanece detenido desde  octubre de 2011 por un problema en el mecanismo de apertura de puertas y  "escasez de repuestos".  Respecto  de la suciedad, dijeron que las tareas de limpieza profunda y alistamiento de  todas las estaciones ocurre entre las 23 y las 4, fuera del horario del  servicio. (La Nación)
    
