29/04/21
Un conductor de tren encuentra 36 diamantes y los devuelve a su dueño
Aunque las joyas están valorados en unos 100.000 dólares, el conductor no se lo pensó dos veces y los entregó a la policía rápidamente
Dejarse algo olvidado cuando se viaja en transporte público es algo más habitual de lo que podamos pensar. Los conductores de trenes y autobuses se han encontrado todo tipo de objetos a lo largo de sus años de trabajo, pero lo que uno de estos profesionales no esperaba es encontrarse un bolso repleto de diamantes y valorado en miles de euros.
Es lo que le ha sucedido a Jonathan Yellowday, un empleado de la línea de ferrocarril Long Island Rail Road (LIRR), en Nueva York. El pasado jueves 22 de abril, este conductor de tren hacía el trayecto entre Penn Station y Port Washington. Cuando terminó uno de los recorridos, hizo su tradicional vuelta de reconocimiento por el tren para ver si algún pasajero se había quedado dormido o había algo raro.
En su camino, Jonathan vio un bolso olvidado en el tren y no dudó en echar un vistazo a lo que había en su interior. Ahí descubrió que había 36 anillos de diamantes, una auténtica fortuna que él devolvió rápidamente sin pensárselo dos veces: "Casi no parecía real. Pensé, esto no puede ser lo que parece", Pero sí eran lo que parecía: diamantes de verdad.
Reconocimiento generalizado
El empleado del ferrocarril comunicó su hallazgo a sus superiores, que rápidamente comenzaron a trabajar para dar con la persona que había perdido los diamantes. Pertenecían a un joyero, que no ha querido ser identificado, pero que sí ha contado su historia y ha querido dar las gracias al honesto conductor por devolver un bolso tan valioso.
El joyero ha explicado a la NBC que, cuando llegó del tren, "comencé a registrar la casa, pensé que los había traído. Repasé mis pasos y recordé que me dejé el bolso en el tren". La fortuna de este hombre es que Jonathan Yellowday ya había devuelto los anillos, así que cuando el empresario de joyas llamó a la policía, estos le dieron la buena noticia de que sus diamantes estaban a salvo.
Phil Eng, presidente de LIRR, felicitó a su empleado "por haber hecho lo correcto". Yellowday reconoce que nunca dudó en quedárselos y su madre le ha pronosticado suerte en el futuro: "Ella me dijo, '¿sabes qué?, un buen karma vendrá se cruzará en tu camino'. Ella es una persona muy religiosa y siempre dice que lo que das a los demás vuelve a ti".
Los 36 diamantes están valorados en unos 100.000 dólares, aproximadamente 85.000 euros al cambio, y ya están en poder del joyero. Este, por su parte, ha prometido un regalo a su ángel de la guarda, creando una pieza especial para que Jonathan Yellowday la pueda lucir orgullosamente en recuerdo de su buena acción. (elconfidencial)