04/09/19
El turismo impulsa los trenes al sur de Francia
A bordo de los trenes de alta velocidad que unen Barcelona con diversas ciudades del sur de Francia se escucha mucho más francés que castellano o catalán. Prácticamente la mitad (el 48%) de los viajeros entre Barcelona y Toulouse son del país vecino. “Barcelona es un atractivo muy fuerte y natural en Francia”, justifica Yann Monod, director general de Renfe-SNCF en Cooperación, la marca de las operadoras públicas de ambos estados para estos servicios transfronterizos. En cambio, a la inversa, los viajeros españoles sólo representan el 17%. En este caso, Monod apunta que “París atrae mucho y es una ruta que funciona muy bien, pero al turista español le cuesta más conocer otros destinos como Toulouse pese a su proximidad”.
Más allá de franceses con ganas de conocer Barcelona y catalanes con ganas de descubrir el sur de Francia en tren, el 35% restante que utiliza los trenes entre Barcelona y Toulouse son viajeros de terceros países que están de turismo por Europa. De estos, los más habituales son los viajeros llegados desde Estados Unidos y Canadá en ruta por diferentes países europeos. Representan el 30%, un porcentaje superior a los turistas del resto del Viejo Continente. Un relevante 15% son procedentes de América del Sur y, en este caso, lo más habitual es que empiecen su recorrido europeo por España y se desplacen posteriormente a Francia en tren.
Los datos pertenecen a un estudio elaborado por Renfe-SNCF en Cooperación a partir de encuestas a bordo entre la capital catalana y la occitana. El informe también apunta que el 57% del pasaje viaja por motivos de ocio y turismo y el 39% lo hace para visitar a amigos, familiares o algún otro motivo privado. Es por eso que tres de cada cuatro personas que se suben a los convoyes de gran velocidad lo hacen acompañados, ya sea por familiares o amigos. Los viajeros de negocios son prácticamente inexistentes en estos corredores.
Esta tendencia queda reforzada por el hecho de que en los meses de julio y agosto se concentra más de la mitad de la demanda. De hecho, la ruta entre Barcelona y Toulouse, con paradas en Figueres y Girona, es tan estacional que la operadora la mantiene abierta exclusivamente para los meses de primavera y verano. El próximo 23 de septiembre dejará de circular el servicio diario y no se retomará hasta abril del año que viene. Desde que se abrió esta conexión, hace cinco años, ha ido ganando pasajeros y ya ha transportado a más de 400.000 viajeros. El año pasado se vio afectada por el impacto de las continuas huelgas de los ferroviarios franceses y se notó en los números pero, a falta de unos días para cerrar la temporada, este año la cifra de pasajeros ha vuelto a crecer. (La Vanguardia)