04/07/19
Malestar de usuarios por el incremento del pasaje en el tren internacional
Sorpresa, enojo e impotencia fue lo que sintieron los usuarios del tren que traspone el puente internacional San Roque González de Santa Cruz, que une Posadas y Encarnación. Es que desde ayer el pasaje se incrementó un 118 por ciento: de 56 pesos que valía el viaje hasta el martes, pasó a costar 122 pesos o 15.000 guaraníes, en la moneda paraguaya. El último aumento de tarifas se dio el pasado 2 de febrero, cuando pasó de 50 a 56 pesos.
La readecuación tarifaria se dio a conocer a última hora del martes a través de un escueto comunicado de prensa emitido por la empresa Don Casimiro, que también tiene la concesión del servicio de colectivos internacional a la vez que dispone del 90 por ciento de las líneas urbanas.
“Es una locura, imposible gastar tanta plata, un viaje de ida y vuelta son casi 250 pesos”, señaló Alberto, uno de los vecinos de la capital misionera que se encontró con la novedad en la cartelería y se convirtió en uno de los primeros desertores del servicio al dirigirse a la parada de colectivos.
A metros de la estación, y antes de llegar a las nuevas casillas migratorias, se encuentra la parada de colectivos que también hacen el recorrido internacional, pero por la mitad de precio: 50 pesos el boleto por persona.
“A mí me parece que es una bestialidad, que no están pensando en los que viajan constantemente que trabajan allá. Subió más del doble y la verdad que no entiendo el porqué del aumento si los servicios no cambian, no cambia el horario como tampoco la frecuencia, no se sabe por qué subió, no hay una explicación más allá de aumentar por aumentar”, se quejó otra usuaria, María. Celia, por su parte, vive en Encarnación pero trabaja en Posadas. Cruza tres veces por semana para limpiar y planchar en casas de familia, y esos pocos minutos en que el ferrocarril cruza la orilla fue clave para cumplir con sus obligaciones. No obstante, esta suba tarifaria la obliga a reorganizar su rutina. “Gano 600 pesos la jornada, no puedo gastar casi la mitad en pasaje, no sirve así”, se lamentó.
A esta situación, los taxistas vieron la oportunidad de generar movimiento en sus arcas. Se acercaban al punto donde estaban los “desertores” del tren y les ofrecían cruzar rápido a Encarnación por un valor de 100 pesos por persona. Por su parte, los conductores de los autos particulares pasaban y ofrecían lugares en su vehículo por el mismo precio del pasaje en colectivo.
Servicio afectado
Desde mediados de mayo el tren circula sólo de lunes a viernes. Por una cuestión de costos, la empresa decidió quitar el servicio los fines de semana y feriados. Desde el 21 de ese mes, el primer viaje del día parte desde Posadas a las 7.15 y el último servicio desde Encarnación sale a las 18.30 rumbo a la capital misionera.
Poco después de eso, la firma instaló en la agenda pública la intención de dejar de operar definitivamente, pese a que la decisión no es unilateral ni arbitraria dado que depende de la autorización de la Subsecretaria de Transporte de Nación. Desde Nación se recordó que la firma tiene “un contrato de concesión para la prestación de este servicio que tiene plena validez hasta el año 2022”.
No se dieron a conocer plazos ni reclamos, pero trascendió que la decisión responde a que la venta de boletos se desplomó hasta un 70 por ciento.
El argumento de la suba tarifaria
A principios de junio la empresa privada que explota los servicios, Don Casimiro, había pedido una actualización de la tarifa y habían dicho que cada vez menos gente usa el tren. Para argumentar un nuevo incremento dijeron que “los ingresos de la empresa dependen sólo de las tarifas cobradas, ya que no se perciben subsidios de ningún tipo”. Y explicaron esa vez que “la tarifa es una función económica resultante de la relación entre los ingresos y los costos de operación del servicio. La última resolución del Ministerio de Transporte de la Nación de ajuste de tarifas se dictó en diciembre de 2016, sobre la base de costos aun anteriores”.Y agregaron que a la baja venta de boletos se sumó que “desde febrero de 2019, Aduana-Afip no permite trabajar los sábados y feriados, lo que afecta el volumen de pasajeros mínimos para sostener el servicio”.Incluso no se abonaron salarios de los trabajadores “ya que la empresa no dispone de los fondos para ello”, se excusó la firma que explota el 90 por ciento de las líneas urbanas de colectivo en Posadas. Desde su inauguración en diciembre de 2014, el servicio ferroviario se convirtió en favorito por los vecinos y turistas para ir o volver del Paraguay. (El Territorio)