10/06/14

 

Por tierra, peor que en tren

 

Tras el descarrilamiento del Tren Patagónico los pasajeros volvieron a Viedma en micros, con un pobre servicio

La odisea de 173 pasajeros que viajaban en la formación del Tren Patagónico que descarriló en la madrugada en cercanías de Ramos Mexía culminó ayer pasadas las 15, cuando las últimas 130 personas llegaron a esta capital a bordo de combis y colectivos.

El tremendo accidente que provocó que sendos rieles se incrustaran en el lateral de un vagón de encomiendas fue después de las 3 y obligó a que desde la empresa provincial se dispusieran vehículos de transporte automotor para que los viajeros llegaran a sus lugares de origen. Los que arribaron ayer a la estación viedmense no podían ocultar su malestar. Algunos radicaron sus quejas en el libro para tal efecto y amenazaron con otras acciones posteriores para difundir lo ocurrido, exigir resarcimientos y requerir que nunca más vuelva a producirse una situación semejante.

A lo acontecido en plena Línea Sur, a unos 30 kilómetros de Ramos Mexía, se sumaron la espera de más de cinco horas hasta que llegaron los vehículos de traslado y además algunos inconvenientes que se dieron en los micros. Varios se quejaron de problemas con la calefacción que originaron que los transportados se descompusieran de calor, ya que a pesar del reclamo airado a los choferes no obtuvieron respuesta para que la temperatura del interior fuera menos extrema.

Lorena, una viedmense que viajó con sus dos hijos, adolescentes, Ciro y Wanda, dijo a DeViedma que "ninguno de los vagones alcanzó a volcar, pero se salieron de sus vías y se separaron los de carga. No se veía absolutamente nada, pero por suerte no se cortó la calefacción". Dijo que durante las cinco horas que esperaron la llegada de los colectivos "caminamos un rato por el campo, tomábamos aire, fumábamos un poco, dormíamos de ratos para pasar el tiempo". Su hijo explicó que se encontraban "durmiendo, cuando de repente sonó todo; me acordé de otro descarrilamiento anterior -en el que estuvo hace 4 años- y por eso grité que se agarraran fuerte". Su madre indicó que "ninguna autoridad nos dio ninguna explicación, nadie dijo nada, en un momento se comentaba que un perro había muerto en el vagón de encomiendas pero un empleado lo negó. Una mujer se golpeó un poco porque iba en el vagón comedor y una señora mayor que tenía asma también sufrió la situación".

Negó que se hubieran dado escenas de nerviosismo entre el pasaje. "La gente estaba tranquila, no sé si es porque estamos acostumbrados y ya nos subimos al tren pensando que puede pasar algo", sotuvo. "El riel atravesó ese vagón, pero si hubiera sido el de al lado, que era el camarote, estábamos hablando de una tragedia", agregó.
Por otro lado, ayer se conoció que el Tren Patagónico también tuvo un atraso de varias horas en el recorrido de Viedma a Bariloche que salió el viernes y llegó a la cordillera el sábado. La causa fue el congelamiento de los compresores.

Sobre estos hechos el presidente de Tren Patagónico, Jorge Maljasian dijo a Radio Encuentro que "cuando salió la formación de Viedma a Bariloche se nos congelaron los compresores y no teníamos frenos. No íbamos a exponer a nadie y por eso se dio el atraso. A la vuelta tuvimos una desgracia con suerte y el tren descarriló. Tuvo que ver con las inclemencias del tiempo en la Línea Sur. La máquina levantó un riel y por eso descarriló el tren". En este marco, el funcionario aseguró que "las vías están en buen estado. Estas cosas pasan, vamos a tratar de que no vuelvan a pasar. La gente viene en camino para trabajar en las vías". Agregó que para la próxima salida "estamos evaluando la posibilidad de salir con el tren de pasajeros desde Viedma hasta el lugar del accidente y hacer un by pass para llegar a Bariloche".

Otro que viajaba con su familia era el ex director de Deportes en la gestión de Miguel Saiz, Ricardo Vélez, quien hizo un queja formal por lo vivido. El dirigente del PPR - Pro, visiblemente molesto, relató lo acontecido y resaltó "que el comentario de todos es la falta de mantenimiento de vías, están un desastre, se metieron tipo gancho en los vagones". En el mismo sentido, un maquinista actual, que pidió reserva dijo que "no hay mantenimiento, las cuadrillas no tienen nada, ni tirafondos, ni durmientes, ni rieles de reemplazo. Probablemente cuando pasó el tren de ida rompió la vía y como es fin de semana los operarios no andan y nadie vio el problema, hasta que pasó esta formación y ocurrió el accidente. Para andar tranquilos en esta vía deberíamos andar a 40 km/h, pero el viaje sería una tortura". (Río Negro)

 

 


Última actualización Martes 10-Jun-2014 ---- info@puntaderieles.com.ar / info_punta_de_rieles@yahoo.com.ar